El «vamping» se ha convertido en una práctica frecuente entre jóvenes que permanecen hasta altas horas de la madrugada despiertos usando sus dispositivos electrónicos, pudiendo producirse una disminución significativa en su tiempo de descanso. La Asociación Española de Pediatría asegura que por la noche es cuando se produce la mayor probabilidad de ser víctima de acoso, «grooming» (contacto online entre menores y adultos con fines sexuales) y «sexting» (intercambio de fotos o mensajes con contenido sexual) debido a que es cuando los jóvenes tienen mayor intimidad al encontrarse sus familiares en otras habitaciones. El «vamping» suele producirse sobre todo cuando se tiene escaso tiempo para socializar durante el día y se tiene una elevada necesidad de sentirse perteneciente a un grupo, por lo que también puede producirse en adultos. Las consecuencias más frecuentes de este mal hábito son trastornos del sueño, trastornos de la alimentación, depresión, ansiedad, mayor irritabilidad y dificultades para mantener la atención. Mis consejos son: limitar el uso de la tecnología, respetar los horarios de sueño, no disponer de dispositivos electrónicos cerca de la cama, dejar espacio para socializar durante el día, llevar a cabo toda la familia rutinas acordes para dar ejemplo.#vamping#nuevastecnologias#jovenes